¿Que hacemos con las Redes y nuestro pasotismo ?

¿Qué hacemos con los logaritmos de Instagram?

¿Qué hacemos con los seguidores vagos?

¿Qué hacemos con estas ansias que nos pueden, de conseguir suscriptores?

¿Qué hacemos con nuestra propia pereza, laxitud y flojera?

¿Que estamos haciendo todos?,  sería la pregunta.

Instagram, Facebook, Youtube, parecen haber cambiado. Evolucionado.

Y a nadie, por ahora, y aparentemente, les gustan estos cambios.

Parece ser, por lo que he ido averiguando, que el sistema que teníamos para visualizar las fotos subidas a una red, de aquellas personas a las que seguimos, o de las que somos suscritores,  ha cambiado. Estas ya no aparecen en orden cronológico de publicación, sino , que Instagram decide cuales son las que más te pueden interesar, en función a los números de likes que uno da a cada foto, a la interacción que tenemos con esas personas y sus subidas, y las búsquedas que realizamos por internet.

Esto hace que muchas de las publicaciones a las que estamos suscritas, no las veamos, con la frecuencia de antes, y que si nos acordamos o nos damos cuenta de que llevamos días sin ver las publicaciones de alguien en concreto, nos veamos obligados a ir en expreso al perfil de esa  persona, y ver sus últimas fotografías.

Esto no nos gusta. Parece ser que a nadie le gusta.

Pero no todo está perdido. Instagram, Facebook, …Internet en general, nos dan la solución. No es un hecho inamovible.

Pero es una solución que nos obliga a actuar, a movernos, a tomar cartas en el asunto, y eso, amigos, tampoco parece ser la vocación de la gran mayoría, acostumbrada a la gratuidad, a la pereza de recibir sin dar.

Os explico la solución.

Puesto que parece ser que veremos aquello que nos interesa, si se lo hacemos saber a las redes sociales, con likes, comentarios y demás, esa es la solución; Dar likes, comentar, compartir, interactuar con aquellos a los que seguimos, cuando suban una foto que nos guste. Dedicar unos segundos a  decirles que nos gusta, lo que hacen, que lo valoramos. Hacer las preguntas que nos interesen o agradecer ese trabajo que realizan para nosotros de forma gratuita.

Así de simple.

Pero claro… para eso, tenemos que pararnos un momento, y escribir, o ser conscientes de que debemos hacerlo, no solo por nosotros mismos, para que podamos ver en primer lugar aquellas imágenes,  que más nos interesan, sino que debemos hacerlo, porque considero que es de ley.

Pesemos porque es de ley.

Estas personas invierten un gran número de horas, de ingenio, de dinero, en fabricar estas imágenes para redes que nos les proporcionan ningún beneficio económico. Son redes que como mucho les aportan prestigio y publicidad. Que en el caso de personas que venden algún producto o servicio en su vida real, esto  está muy bien, pero en el caso de que sean personas que suben fotos, solo por hobby, estas redes no les reportan beneficios económicos de ningún tipo, y el único aliciente o premio, o pago, que tienen, son nuestros likes, sin los que la motivación empieza a desparece, y con eso los primeros damnificados somos nosotros, los seguidores.

Pero no nos podremos quejar, porque se fueron, dejaron de publicar, gracias a nuestra inactividad.

Yo tengo pocos suscriptores. Su número asciende de la forma más lenta posible. No me preocupa. No me gano la vida con los suscriptores,

Pero sí que es cierto, que este tema, me ha hecho reflexionar, y sí que ha conseguido que sienta un poco de rabia ante tanta pasividad como nos rodea, no solo en este tema tan trivial, sino en realidad, en todos los temas.

La pasividad, la permisividad, la laxitud son  ya nuestra forma de vida y de ser.

Y es algo nauseabundo.

Por tanto, este tema, me sirve no solo para incentivaros a ser más conscientes de que las cosas las podemos modificar con nuestros actos, de que agradecer es de justicia, de que si hay algo que desaparece o se modifica de forma desagradable por nuestra culpa, no podremos quejarnos, ni mirar a otro lado, buscando culpables inocentes.

Que este asunto, de fotos, redes, y demás, que no tiene excesiva trascendencia, nos sirva para entender que por la vida hay que pasar pisando el suelo con fuerza, y que ir de puntillas, como un fantasma, no sirve más que para perder.

Perder el tiempo, los amigos, la familia, la vida.

Así que hagamos algo. Movámonos. Agradezcamos a cada paso, lo que nos dan, de forma gratuita o no, pero que nos dan a fin de cuentas.

ACTUEMOS